Descubre dónde se rodó el Festival de Rifkin, la última película de Woody Allen. En Goodyear te llevamos por los escenarios más emblemáticos.
“Quiero presentar al mundo mi visión de Donostia, una visión de un paraíso que me encanta”. Lo decía Woody Allen en la presentación del rodaje de su nueva película con título provisional “El festival de Rifkin” que ha elegido la ciudad de Euskadi como su centro de operaciones.
Donostia es una ciudad de cine. Lo aseguran los rodajes que han acogido sus calles y que conforman una perfecta ruta de cine por San Sebastián y el hecho de que uno de los festivales de cine internacionales más importantes, el Festival de Cine de San Sebastián – Donostia Zinemaldia (el único festival del país que puede presumir de pertenecer a la máxima categoría, A, que solo tienen otros catorce en todo el mundo) tenga su sede en el Palacio de Congresos y Auditorio Kursaal, icono de la ciudad. Si a esto unimos la pasión de uno de los cineastas más reconocidos del siglo XXI, Woody Allen, por España como escenario para sus filmes, el resultado no podía hacerse esperar.
Allen abandona su Nueva York fetiche, esa que retrató en “Manhattan”, “Balas sobre Broadway”, “Annie Hall” o “Misterioso asesinato en Manhattan”. Y lo hace para poner un océano en medio. Tras decidir rodar fuera de Estados Unidos y retomar el contacto con Mediapro Studio, en la elección de San Sebastián como escenario parece haber pesado que el director conocía ya la ciudad. Recordemos que en 2004 acudió al Donostia Zinemaldia para recibir el Premio Donostia y que en 2008 rodó y presentó “Vicky Cristina Barcelona”.
Dónde se rodó “El festival de Rifkin”
En este caso, la ciudad no se adapta a las exigencias del guión. Sino que el guión se ha construido ad hoc para ajustarse a Donostia con una historia que además se localiza en el Festival Internacional de Cine y en la que podremos ver a Elena Anaya, Sergi López, Wally Shawn, Christoph Waltz y Gina Gershon. En el elenco destaca también el director y actor Louis Garrel que regresa a Donostia tras recibir Premio del Jurado al mejor guión por “Un hombre fiel” en el pasado Festival de Cine de Donostia.
La calle Campanario, en plena Parte Vieja de San Sebastián, tiene el honor de ser la primera localización donostiarra del último trabajo del cineasta neoyorquino. Fue el primer escenario de un rodaje que se prolongó durante once semanas por el centro de la capital. Los más cinéfilos reconocerán en la gran pantalla el Boulevard, la Parte Vieja y la plaza Cervantes pero también otros municipios como Zumaia o Pasaia Donibane.
El Palacio Miramar o el hotel María Cristina y todos los lugares relacionados con el Zinemaldia son otras de las localizaciones de un intenso rodaje que también ha visitado zonas de costa y una zona boscosa cercana al centro.
Pero el recorrido de Allen por Donostia continúa: Itzurun, la ya cinematográfica playa de Zumaia, el voladizo de la playa de la Concha son dos escenarios fundamentales que cualquier amante del séptimo arte reconocerá en la gran pantalla y que se suman a la ruta que el director de fotografía Vittorio Storaro ha construido para mantener el ambiente y clima cinematográfico de la película.
La historia de la última película de Woody Allen
Aún sin título definitivo, el último proyecto de Woody Allen que se conoce de forma provisional como “El festival de Rifkin” es una comedia romántica que trata sobre un matrimonio estadounidense que acude al Festival de Cine de San Sebastián, donde ella mantiene un affaire con un director de cine francés y el marido se enamora de una española. La ciudad y el cine les transforma, pero para saber hasta qué punto no bastará solo con recorrer los escenarios de la película en Donostia sino que habrá que esperar hasta su estreno.
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