Te traemos la ruta del románico por el Valle del Boi, con la que podrás disfrutar de los mejores paisajes del valle. ¡Descúbrela!
Esta semana proponemos una escapada perfecta para los meses de invierno, un viaje al Valle de Bohí (Vall de Boí en catalán) en la provincia de Lérida en Cataluña. Visitando el Valle de Bohí disfrutaremos de un fin de semana muy completo con cultura, naturaleza y ahora en invierno con óptimas posibilidades de esquiar.
En el Valle de Bohí encontramos la mayor concentración de arte románico no solamente de España, sino de todo nuestro continente. Gracias al hecho que el valle está bastante aislado del resto del país, las iglesias puramente románicas del Valle de Bohí han conseguido conservarse casi intactas. En el año 2000, el conjunto de iglesias fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
A primera vista puede ser sorprendente que encontremos una concentración tan grande de iglesias en un espacio tan reducido. Sin embargo, tenemos que recordar que en el siglo XI-XII cuando estas iglesias fueron construidas, tenían un papel mucho más completo que ser sólo lugares de oración. La gente se reunía dentro de las iglesias y muchas veces incluso se refugiaba allí.
En total ocho iglesias y una ermita forman parte del conjunto románico. Las iglesias más famosas son las de Sant Climent de Taüll y Sant Joan de Boí, pero las otras también merecen ser visitadas. Las iglesias de Santa María de Taüll, Santa Eulàlia de Erill la Vall, Sant Feliu de Barrera y la Natividad de Durro, las podremos visitar todo el año, mientras que en Santa María de Cardet solo se puede entrar en agosto. La iglesia de la Asunción del Cóll y la ermita de Sant Quirc de Durro no están abiertas para el público.
Desde fuera las iglesias son muy parecidas, sin embargo encontramos mucha diferencia entre los interiores. La iglesia de Sant Climent de Taüll es quizás la más visitada porque dentro podemos disfrutar de una fantástica proyección de cómo era el Pantocrator; un asombroso conjunto de frescos románicos. En la iglesia de Sant Joan de Boí encontramos una gran variedad de frescos de santos, personajes o incluso animales. Merece la pena dedicarle un día entero a la visita de las iglesias, cada una de ellas tiene pequeños detalles interesantes. En la mayoría podemos subir al campanario de donde siempre se aprecian bonitas vistas del pueblo y de las montañas en los alrededores. Recomendamos especialmente subir al monte de la ermita de Sant Quirc de Durro para disfrutar de unas vistas realmente increíbles.
Aparte de visitar las iglesias, el Valle de Boí ofrece muchas otras actividades durante nuestra escapada. Un lugar fabuloso para descansar un rato es el balneario de Caldes de Boí donde podemos disfrutar de jacuzzis, saunas y baños turcos en un entorno natural de maravilla. Además, en el balneario de Caldes de Boí encontramos una variedad de aguas con efectos terapéuticas que es única en todo el mundo.
Otro gran atractivo que se encuentra muy cerca del Valle de Bohí es el Parque Nacional de Aigüestortes i Estany de Sant Maurici, probablemente el parque natural más bonito de toda Cataluña. En verano podemos practicar senderismo en muchas rutas de diferentes dificultades, mientras ahora, en invierno, el parque es un lugar perfecto para hacer rutas en raquetas de esquí, preferiblemente con guía. Y si queremos alguna actividad con más adrenalina, muy cerca se halla la estación de esquí Boí-Taüll que tiene una gran variedad de pistas con diferentes desniveles y con nieve de excelente calidad.
Blogger de viaje y fotógrafo húngaro adoptado desde hace una década por Cataluña. Con 40 países y 5 continentes a sus espaldas escribe junto a su otra mitad italiana, Rachele, su blog Surfing the Planet – http://www.surfingtheplanet.com/ donde comparten con los lectores sus aventuras y afición por la naturaleza y culturas locales. Han ganado varios premios y sido citado en diferentes ocasiones entre los blogueros de viaje más populares en lengua española.
?
