Bienvenidos a la Sierra de Guadarrama, uno de los lugares más bellos a tiro de piedra de la capital de España. Descúbrela de la mano de Goodyear
Existen lugares cerca de las grandes ciudades que, precisamente por esa cercanía, se convierten en grandes olvidados para sus habitantes. Destinos maravillosos a los que uno no termina nunca de ir con la excusa de que ‘están tan cerca que podemos ir cualquier día’. Uno de esos destinos está apenas a una hora de Madrid, pero tiene todo lo que cualquier persona necesita: naturaleza a borbotones, pueblos encantadores, miradores impresionantes y rutas para disfrutar solo o en compañía. Bienvenidos a la Sierra de Guadarrama, uno de los lugares más bellos a tiro de piedra de la capital de España.
Sierra de Guadarrama: una inagotable fuente de ideas
Con casi 1600 kilómetros cuadrados de extensión, la Sierra de Guadarrama ocupa parte de las provincias de Ávila, Segovia y Madrid. Pertenece al Sistema Central y se localiza entre la Sierra de Gredos, al sureste, y la Sierra de Ayllón, al noroeste. En total, ocupa unos 80 kilómetros de longitud, donde encontramos multitud de reclamos.
Peñalara
Uno de los lugares más emblemáticos de la zona es Peñalara, el pico más alto de la Sierra de Guadarrama con 2.428 metros de altura. Por eso, es habitual encontrarse a decenas de senderistas ascendiendo este macizo, ya que es apto para quienes tienen un buen nivel físico: las vistas desde lo más alto merecen la pena.
La mejor opción si se dispone de tiempo es realizar una ruta circular de 14 kilómetros que parte del Puerto de Cotos y que tiene una duración de unas siete horas, haciéndolo sin prisa, aunque tiene algunos pasos poco recomendables para quienes sufren de vértigo. Si buscamos algo más tranquilo, otra buena posibilidad es salir del puerto y andar tres kilómetros hasta la Laguna Grande de Peñalara, para disfrutar del paisaje, y regresar después por el mismo camino.
Navacerrada
Otra opción muy interesante para hacer ejercicio pasa por el Puerto de Navacerrada, el lugar que cada temporada de esquí eligen miles de madrileños para practicar su deporte favorito sin tener que viajar durante horas. Ese es el único problema de esta zona de montaña: la cantidad de personas que cada fin de semana deciden visitarla. Eso provoca atascos habituales los sábados y domingos, aunque es fácil evitarlos: o madrugar o visitarla de lunes a viernes.
Pero Navacerrada es más que esquí. Aquí se encuentra una de las mejores rutas de senderismo de Madrid, la conocida como el Camino Schmidt. Se trata de 12 kilómetros entre Navacerrada y Cercedilla donde iremos disfrutando de vistas espectaculares y preciosas formaciones naturales. La Bola del Mundo, un final habitual de la Vuelta Ciclista a España, es otro de los lugares de peregrinación de muchas personas cada fin de semana para disfrutar de la naturaleza en todo su esplendor.
Pueblos con encanto en la Sierra de Guadarrama
Pero si la naturaleza y el senderismo van de la mano en esta zona del centro de la península ibérica, los preciosos pueblos de la zona también tienen mucho que ofrecer. Localidades como Cercedilla, Becerril de la Sierra, Alpedrete o Manzanares el Real, entre otros, reúnen muchos atractivos que les hace merecer una visita en nuestro recorrido por la Sierra de Guadarrama.
Uno de los lugares más llamativos es Manzanares el Real y su famoso Castillo de los Mendoza, una imponente construcción con más de 500 años de historia que mandó construir Diego Hurtado de Mendoza, el primer Duque del Infantado. Era un destino habitual para los reyes de Castilla, que acostumbraban a cazar en las inmediaciones, la zona conocida como el Real de Manzanares.
Becerril de la Sierra es otro de los lugares característicos de esa zona del Real de Manzanares. Durante décadas fue uno de los principales proveedores de granito para la villa de Madrid, pero hoy es un pueblo agradable y bien conservado. Sus iglesias de San Andrés Apóstol y Nuestra Señora del Valle, la conocida como Fuente de La Bola o el edificio porticado que alberga la sede del Ayuntamiento son los lugares más emblemáticos.
Aunque si hay que hablar de personajes emblemáticos de esta zona de la Sierra de Guadarrama ese sería el inolvidable Paco Fernández Ochoa. Toda la familia de estos legendarios deportistas procede de Cercedilla y allí han vivido toda su vida. De entre todos ellos destacaron dos personas que, desgraciadamente, ya no nos acompañan hoy: Blanca Fernández Ochoa y su hermano Paco, a quien Cercedilla dedicó su museo sobre esquí poniéndole su nombre.
No podemos marcharnos de la Sierra de Guadarrama sin pasar por Alpedrete, otra de las localidades más conocidas de la zona. Tanto el Ayuntamiento de la ciudad como la iglesia de la Asunción de Nuestra Señora, ambos en la Plaza de la Villa y en edificios contiguos, fueron erigidos sobre las ruinas del Palacio de los Condes de Adanero y son dos de los focos de atención de este pequeño pero encantador municipio.
Terminamos este recorrido en Rascafría, otro lugar único y que muchas personas visitan para hacer la conocida como ruta de la Cascada del Purgatorio. Se trata de uno de los senderos más conocidos del Valle del Paular y que conduce a la ribera del arroyo del Aguilón. Muy cerca de allí está la Cascada del Purgatorio, un lugar espectacular compuesto por dos saltos de agua que impresionan a los visitantes.
La Sierra de Guadarrama tiene mucho que ofrecer: rutas preciosas, parajes evocadores y miradores sorprendentes se mezclan con pueblos con encanto que ofrecen gran belleza tanto a nivel artístico como gastronómico. Prepara la maleta: ya tienes la excusa perfecta para tu próxima escapada.
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