Descubre con Goodyear y Nani Arenas las paradas imprescindibles en la ruta por el Algarve portugués
El sur de Portugal es buen lugar para un viaje en coche con el mar como protagonista. Después de conocer las joyas ocultas del norte, es hora de conocer el Algarve y perdernos a lo largo de los aproximadamente 160 kilómetros de costa en los que se suceden pueblos pintorescos de color blanco impoluto habitados por gente tranquila, hospitalaria, acostumbrada a tratar con visitantes. Y paisajes con playas interminables bañadas por aguas turquesas. Sigue leyendo y descubre un listado con las paradas imprescindibles en la ruta.
Empezamos en la frontera, marcada por la desembocadura del río Guadiana que separa dos localidades: Ayamonte, en Huelva en el lado español; y Vila Real do Santo Antonio, el primer pueblo de Portugal. También puedes “atacar” Huelva camino a Barrancos en busca de la mejor ruta del jamón-presunto pero eso es otra historia…
Vila Real do Santo Antonio: parada en la playa de Monte Gordo
Es Vila Real una localidad de calles cuadriculadas, trazado perfecto desde el punto de vista urbanístico. Su corazón es la Plaza del Marqués de Pombal. De aquí parte también la ruta de Teofilo Braga, la calle más comercial, siempre llena de visitantes. Turistas a quienes les gusta pasear tras un día en la playa de Monte Gordo, famosa por sus pinares plantados para evitar que la arena invadiese la zona urbana.
Algarve por Sotavento: Tavira
Seguimos el viaje por el Sotavento, nombre con el que se conoce la parte oriental del Algarve y llegamos a Tavira, a solo 20 kilómetros de Vila Real. Localidad oculta en el bello parque de la Ría Formosa, la más extensa zona de lagos de Portugal con una extensión que supera los 180 kilómetros cuadrados.
Merece Tavira una visita por ¡treinta y siete iglesias! Un récord para una población pequeña. Conserva la esencia del viejo Algarve. Es uno de los pocos rincones que han sobrevivido a la fiebre del ladrillo. Como ejemplo, cabe destacar que conserva un puente románico de siete arcos que atraviesa el río Gilão, que divide la localidad en dos.
Olhao: ruta de pescadores
Seguimos en el parque de la Ría Formosa y a 28 kilómetros de Tavira encontramos Olhão. Rincón aún habitado por pescadores cuyas casas, con forma de cubo, han sido diseñadas para poder controlar las mareas y saber cuándo es el mejor momento para salir a pescar sardina, industria de la que aún vive gran parte de la población. Un consejo, no dejes de visitar su mercado.
Imprescindible: Vilamoura
En nuestra ruta en carretera por lo mejor del Algarve, cogemos de nuevo el coche para salvar 32 kilómetros hasta Vilamoura. Dejamos atrás Faro, capital del Algarve, donde arranca el llamado Barlovento (nombre de la zona del occidente). Aquí cambia todo. Dejamos atrás los pueblos encantadores para sumergirnos en la capital de la gente guapa, del derroche y del glamour. Basta echar un vistazo a los grandes yates atracados en su puerto deportivo para entender la esencia del lugar.
Es llamativo el número de coches deportivos que circulan por estas calles. Y de campos de golf en los alrededores. También aquí encontramos uno de los tres casinos del Algarve, y probablemente el más animado (los otros están en Monte Gordo y en en Portimão). Es también Vilamoura el mejor lugar para ir de compras sobre todo si te gustan las tiendas de grandes firmas internacionales.
Albufeira: paraíso del turista
Solo 17 kilómetros separan Vilamoura de la localidad más turística del Algarve, Albufeira. Llena de gente en verano, paraíso del turista. Donde es difícil encontrar alojamiento si no eres previsor. En cuyas animadas terrazas nunca cabe un alfiler. Con una zona comercial animada, aceptable oferta gastronómica y playas donde desconectar del mundo, aunque habitualmente rebosantes de gente, especialmente en temporada alta. Huye de aquí si lo que buscas es un destino tranquilo. Albufeira es para amantes del bullicio.
El tesoro de Portimão: la playa de Rocha
Portimão, otro de los grandes destinos turísticos del sur de Portugal, probablemente la segunda localidad en número de visitantes que llegan especialmente atraídos por la belleza de la playa de Rocha, el tesoro de esta localidad situada a 35 kilómetros de la ciudad. A partir de aquí la orografía se vuelve más abrupta y empiezan a aparecer auténticas calas dominadas por el agua cristalina y fresca del atlántico.
Sagres: escuela de grandes marinos
Cerramos el paseo costero en Sagres, a 55 kilómetros de Portimão. Una visita obligada y el mejor lugar para contemplar los grandes acantilados del Algarve donde reinan los vientos eternos. Es uno de esos rincones que rebosa historia relacionada con la navegación. Escuela de grandes marinos como Cristóbal Colón o Vasco de Gama cuya esencia flota en el ambiente.
Imprescindible acercarse hasta el Cabo de San Vicente, con su faro, una réplica del que en 1515 mandó levantar el obispo del Algarve para seguridad de los marineros. Aprovecha el viaje para tumbarte al sol en las playas de Beliche y o Mareta, aunque mejor llévate una sudadera. El viento es un habitante constante en esta zona extrema de Portugal.
Fuera de esta ruta por el Algarve (de Vila Real a Sagres) se quedan muchas paradas. Adéndrate en kilómetros de costa, de luz y sol, y recomiéndanos tu propio itinerario. Recuerda que estos son los kilómetros que cuentan: los que se disfrutan.
Playa · Portugal · Turismo · Vacaciones
Periodista especializada en viajes y comunicación turística. Firma habitual en medios de comunicación especializados en viajes: El País, National Geographíc España, El Mundo, revista Viajar, Altaïr, Rutas del Mundo, Conde Nast Traveler.…En 2008 creó http://www.laviajeraempedernida.com/, actualmente considerado uno de los blogs de viajes más influyentes de habla hispana. Y es miembro de la red de comunicadores Travel Inspirers, uno de los grupos de comunicación digital más fuertes en el segmento “travel” en lengua española