Si quieres aprovechar al máximo la experiencia en un Track Day, en este post te damos las claves antes de entrar a correr en circuito
De origen británico, pues fue en el Reino Unido donde surgieron los primeros, un “track day” es, en pocas palabras, una experiencia en la que pagas por entrar en un circuito con tu coche o con el de una empresa que se dedique a este tipo de eventos para hacer tandas y disfrutar de la conducción sin las limitaciones de velocidad de una carretera convencional.
Para correr en un circuito y disfrutar al máximo del mismo, siempre con seguridad, hay una serie de recomendaciones previas que has de tener en cuenta. La primera es la de estudiar el trazado, ya que con esa información te harás una idea mental de las zonas donde puedes darle más gas al coche y las partes en las que has de ser más conservador.
Al mismo tiempo, este estudio previo del circuito te permitirá ahorrar tiempo a la hora de acostumbrarte al trazado y aprovecharás mucho más tu jornada al volante.
¿Qué necesitas para participar en un Track Day?
El coche es el elemento imprescindible, junto tu presencia, en un “track day”. Aquí, las opciones son mayores: puedes participar con tu propio coche (o el de un amigo o familiar) o conducir con un vehículo que te proporcione la marca automovilística (es muy común entre los fabricantes hacer “track days” entre sus clientes o potenciales compradores) o el organizador del evento (hay empresas que cuentan con una flota de diferentes modelos para estas experiencias, incluidos superdeportivos).
Si el coche es propio, lo esencial antes de apurar curvas e ir a toda velocidad por las rectas del circuito es revisarlo y ponerlo a punto para no llevarte ningún susto. Aparte de comprobar el buen estado del vehículo en general (que no tenga ruidos raros o que no detectes pérdidas de potencia, por ejemplo), has de verificar los niveles de los principales líquidos del automóvil (aceite del motor y líquido de frenos, principalmente).
También es recomendable que verifiques el estado de las pastillas y los discos de freno, los asientos y los anclajes de los cinturones de seguridad con el objetivo de que tu coche sea lo más seguro posible y puedas reaccionar ante alguna situación complicada.
El Track Day es sinónimo de neumáticos deportivos: ¿equipar slicks o semi slicks?
Vital es el apartado de los neumáticos. Su estado, teniendo en cuenta que vas a exigirles más de lo habitual, debe ser perfecto: presión, profundidad del dibujo que no tengan abolladuras, etc. Piensa que la combinación del asfalto del circuito, las altas velocidades y las continuas frenadas exigen que lleves este elemento en óptimas condiciones.
Una opción en este sentido es que te compres un juego de neumáticos específicamente para realizar un “track day” y apostar por unas gomas realizadas específicamente para disfrutar en el circuito con la mayor de la seguridad.
Una de las posibilidades es usar un juego de neumáticos slick o lisos, un tipo de neumático que carece de dibujo en la banda de rodadura y que es usado principalmente en competición porque facilita la aceleración en asfalto seco.
Otra variante son los neumáticos semi slick, que son simplemente neumáticos slick con ranuras. Así, su desempeño en materia de adherencia es relativamente inferior, pero las ranuras permiten la evacuación del agua a fin de evitar todo riesgo de aquaplaning en asfalto mojado.
Otra de las ventajas que tienen es que pueden usarse para carretera convencional sin ningún problema. Aquí, hay que destacar el Goodyear Eagle F1 Supersport RS, que cuenta con la última tecnología de la marca y con toda la experiencia de Goodyear en el mundo de la competición.
¡Que comience la carrera!
Una vez en el circuito, con tu coche a punto, llega el momento de disfrutar… pero con cabeza. No te agobies por la presencia de otros conductores en la carretera: si el “track day” está bien organizado, os separarán en grupos y apenas coincidirás con alguno en la misma parte del circuito.
Distancia de seguridad con el resto de coches participantes
Lo más habitual es que se ponga un coche de un instructor que os vaya guiando y sirva de referencia. Lo único que tienes que respetar es una cierta distancia de seguridad para evitar imprevistos y saber ser consecuente con tu habilidad al volante y las capacidades del coche que conduces en cuanto a aceleración, frenado, etc.
Las primera vueltas en el circuito
Las primeras vueltas que des al circuito intenta hacerlas a velocidad moderada para irte acostumbrando al trazado (serán menos si has hecho el ejercicio previo de “memorizar” el circuito), a cómo tomar las curvas (ojo, que muchas veces pasarás de rectas infinitas a giros muy cerrados) y, paulatinamente, ve elevando la velocidad hasta el punto en el que te sientas cómodo.
También dentro del circuito: el respeto y la seguridad son imprescindibles
La seguridad de los circuitos es muy grande, con vías escapatorias y protecciones a su alrededor. Si has de adelantar a otro coche, siempre con seguridad, manteniendo una suficiente distancia lateral y, a poder ser, en recta. Piensa que el conductor del otro vehículo no es tu rival, sino alguien que ha ido a divertirse como tú, por lo que evita los piques.
¿Dónde inscribirse en los track days y dónde se celebran?
Hay una lista bastante completa de circuitos donde los puedes disfrutar, como el Circuito del Jarama, Montmeló, Motorland, Navarra o Ricardo Tormo. Incluso se ofrece esta posibilidad en circuitos más pequeños que puedes buscar cerca de tu lugar de residencia.
Normalmente, además de las citadas marcas automovilísticas o de los propios circuitos, hay empresas que se dedican a organizar este tipo de eventos, como Última Vuelta o Luxe Track Days.
En España, los “track days” son, por el momento, poco conocidos< y todavía no cuentan con mucha afición, aunque son experiencias apasionantes en las que puedes aprender mucho y disfrutar de la velocidad sin preocuparte de los radares.
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